La psicopatía – sociopatía, trastorno de la personalidad disocial o antisocial – es un trastorno caracterizado por un patrón general de desprecio y de violación de los derechos humano. No obstante, si bien todos los asesinos en serie son psicópatas, ¡¡la mayoría de los psicópatas no son asesinos!! Y no solo esto, sino que la psicopatía es un tipo de perfil muy buscado en algunas profesiones como, por ejemplo, los economistas, gerentes de grandes empresas, CEO’s, abogados, comerciales…
Por otro lado, se tiene que diferenciar entre tener un trastorno de la personalidad y tener un tipo de perfil psicopático, el que se “necesita” para desarrollar ciertos trabajos. Para poder diagnosticar el trastorno, se tienen que cumplir toda una serie de criterios y tampoco es sobre lo que quería tratar. Más bien quería referirme al perfil psicológico de un psicópata. ¿Queréis saber si os relacionáis con un psicópata? Aquí os explico, a grandes rasgos, sus principales características.
El psicópata tiene una gran capacidad verbal y un encanto superficial, con una autoestima exagerada y una constante necesitado de obtener estímulos por su tendencia al aburrimiento.
Destaca especialmente su carencia de empatía y su crueldad e insensibilidad. Tiene un comportamiento malicioso y manipulador, con una afectividad frívola y una respuesta emocional superficial.
Su actitud es impulsiva, con una gran falta de control sobre la conducta, tendencia a mentir de manera patológica y comportamiento irresponsable. Su historial de problemas de conducta viene desde la niñez, con tendencia hacia la delincuencia juvenil, pero con carencia de culpa o de cualquier tipo de remordimiento y una gran versatilidad para la acción criminal. En el caso de haber sido puestos en prisión, en la mayoría de las ocasiones se produce revocación de la libertad condicional.
Por otro lado, su estilo de vida acostumbra a ser parasitaria y destaca su falta de metas realistas a largo plazo. Tiene una incapacidad patológica para aceptar la responsabilidad sobre sus propios actos.
En último lugar, su vida sexual suele ser promiscua y tiene un historial de muchos matrimonios de corta duración.
¿Conocéis a alguien así?
